En marcha la tercera edición del proyecto ‘Dona, Alça el Vol’  

Tres mujeres con discapacidad se han incorporado a ECOM para mejorar el conocimiento de sus derechos y capacitarse y empoderarse para convertirse en agentes de cambio y poder concienciar a la sociedad e impulsar transformaciones sociales en beneficio de las mujeres y las personas con discapacidad en general, a través de su activismo y participación en la comunidad. El proyecto contempla también la contratación de una técnica de igualdad, para seguir incorporando y trabajando la perspectiva de género en la organización.

‘Dona, Alça el Vol’ es un proyecto que ECOM impulsamos por primera vez el año el 2019 con el objetivo de promover el empoderamiento de las mujeres con discapacidad física y/u orgánica y la visibilización de las múltiples violencias que sufren, especialmente en la incorporación al mercado de trabajo. Lo hacemos capacitando, creando liderazgo y empoderando cada año un grupo reducido de mujeres con discapacidad ayudándolas a convertirse en agentes de cambio para que, a partir de su experiencia, su activismo y su ejemplo, puedan promover e impulsar cambios en la visión y el comportamiento que la sociedad –incluidas las mismas personas con discapacidad, hombres y mujeres– tiene en torno la mujer con discapacidad.

Este 2021, llegamos ya a la tercera edición de ‘Dona, Alça el Vol!’ y ya se han incorporado a nuestra entidad las tres protagonistas del proyecto de este año. Este año este proyecto contempla también la contratación de una técnica de igualdad, para seguir trabajando la incorporación de la perspectiva de género a la entidad y a los proyectos que desarrollamos, y acompañar el personal técnico de la entidad en su capacitación verso esta vertiente.

Tres mujeres con discapacidad alzarán el vuelo gracias al acompañamiento personal y profesional desde ECOM

Mireya, Esther e Ylenia son las tres mujeres con discapacidad física y/u orgánica que se beneficiarán de este proyecto y recibirán formación y capacitación para mejorar su desarrollo personal y profesional. Junto con ellas, Laura Martí Martorell también se ha incorporado al proyecto “Dona, Alça el Vol”, como técnica de igualdad para trabajar la perspectiva de género en la entidad.

Cada una de las tres mujeres con discapacidad que forman parte de este proyecto tienen un perfil profesional diferente, aun así, comparten su lucha personal hacia las injusticias y las discriminaciones que han sufrido a lo largo de su vida a causa de la discapacidad que tienen.

Mireya Calduch Otón es una “luchadora incansable”, tal como explica ella misma y añade que no solo es así, sino que también se adapta al medio y es empática, sociable, reivindicativa y trabajadora. Su discapacidad sobrevenida le ha hecho “levantar el vuelo hacia nuevos horizontes” y afirma contundentemente que “los límites están para superarlos".

Esther Lobatón García estudia psicología y explica que le gusta el trato con las personas. A Esther, una mujer que se define como luchadora, poco conformista, empática, divertida, muy positiva y extrovertida, las situaciones o cosas injustas le dan fuerza para seguir luchando.

Ylenia Caro Palomo es comunicóloga audiovisual, especializada en realización de televisión. Afirma que se considera a sí misma “una persona perseverante con ganas de cambiar las cosas” y añade que odia “las injusticias y las discriminaciones por el simple hecho de ser esto: personas con circunstancias que no hemos escogido”.

La técnica de género que se ha incorporado al proyecto, Laura Martí Martorell, es psicóloga social especializada en perspectiva de género y violencia machista. Explica que su motivación para adentrarse en este proyecto está causada por “la necesidad de trabajar por un presente y un futuro feminista, especialmente en aquellos colectivos en que más se han vulnerado los derechos, como es el caso de las mujeres con discapacidad”.

Las tres mujeres con discapacidad se han incorporado en diferentes oficinas del Servicio de Inclusión Laboral que ECOM tiene en todo el territorio catalán y, de este modo, también se ha intentado fomentar la conciliación laboral, puesto que estas personas trabajarán más cerca de su domicilio.

El proyecto contempla una parte personal de concienciación de las múltiples discriminaciones que sufren las mujeres con discapacidad; es decir, las mujeres con discapacidad sufren discriminación por razón de discapacidad y género, pero también se pueden ver afectadas por otros ejes de discriminación. En este sentido, una de las vertientes del proyecto es el empoderamiento y la concienciación sobre las discriminaciones que sufren las mujeres con discapacidad. Un camino que tienen que recorrer Mireya, Esther e Ylenia dentro de este proyecto.

Además, las tres mujeres que participan en el proyecto contarán durante los 12 meses con un acompañamiento para favorecer su inclusión al mercado de trabajo una vez finalice su vinculación al proyecto y, si lo quieren, podrán incorporarse como personas usuarias del Servicio de Inclusión Laboral (SIL) para seguir con su itinerario y proyecto laboral con el apoyo técnico que necesiten.

Desde ECOM también consideramos que es relevando el hecho que uno de los ejes de formación que se potenciará es el uso de las TIC, puesto que hay que reducir la brecha digital y prever el analfabetismo digital, un objetivo que se perseguirá a través de la incorporación de las TIC como un espacio más de participación, de presencia, como cauce de comunicación y apoyo a las actividades de vida diaria.

La transformación social, clave en las acciones de las agentes de cambio

Las tres mujeres que han sido seleccionadas, Mireya, Esther e Ylenia, no solo serán las beneficiarias del proyecto, sino también serán las ejecutoras –cosa que supone un trabajo y un sueldo- y dentro de esta iniciativa tendrán que dinamizar actividades de sensibilización, apoyarán a las empresas y también dinamizarán focos grupos, entre otras actividades, por lo cual llevarán a cabo una formación de tres meses para prepararse.

“Tenemos ganas de cambiar las cosas, nuevas ideas sobre como luchar por nuestros derechos y una perspectiva muy parecida sobre qué queremos que cambie en la sociedad y cómo queremos que lo haga”, han manifestado las cuatro mujeres participantes del proyecto de este año. Y es que, el conocimiento, la concienciación y el empoderamiento sobre las discriminaciones que sufren como mujeres con discapacidad física y/u orgánica, podrán ser utilizados para transformar su entorno y, de este modo, que su entorno continúe cambiando las personas de su alrededor. Se trata, pues, de generar una cadena de transformación social.

En este ámbito, también se llevarán a cabo campañas de comunicación y sensibilización en las cuales, las mismas mujeres con discapacidad física y/u orgánica aplicarán su conocimiento en primera persona, para hacer visibles y denunciar las discriminaciones múltiples que sufren, después de haber hecho el ejercicio de concienciación y empoderamiento previo.

Este proyecto ha sido financiado gracias a la convocatoria de subvenciones para programas de interés general a cargo 0,7% del IRPF del Departamento de Trabajo, Asuntos sociales y Familias.