Las cooperativas de vivienda inclusiva como alternativa de vivienda para las personas con discapacidad física y/u orgánica

Cuatro personas con discapacidad física y/u orgánica nos explicaron su experiencia en este tipo de cooperativas en el último taller de asesoramiento colectivo sobre el derecho a la vivienda y a vivir en la comunidad. 
 
El pasado 14 de julio organizamos el taller de asesoramiento colectivo “Cooperativas de vivienda inclusiva: Experiencias de personas con discapacidad”, enmarcado en el ciclo de sesiones virtuales sobre el derecho a la vivienda y a vivir en la comunidad que celebramos anualmente. 
 
En esta sesión contamos con la participación de cuatro personas con discapacidad física y/u orgánica que forman parte de cooperativas de vivienda inclusiva para conocer de primera mano sus experiencias y saber cómo es vivir en una cooperativa de vivienda inclusiva y las dificultades a las que han tenido que hacer frente en relación a su discapacidad. 
 
Las personas que nos acompañaron fueron Almudena Placer, de la cooperativa TerraiCel, la Marta Rodríguez, de la cooperativa Mates Calderi, Montse Torrijos, de la cooperativa Can Carner, y Verònica Armento, de la cooperativa Sotrac. La sesión fue presentada y moderada por la Leticia Esporrin, miembro de la Junta Directiva de ECOM. 
 
Con esta sesión, ECOM hemos vuelto a recuperar la línea de información y compartir conocimiento sobre las cooperativas de vivienda que empezamos hace tres años y que paramos durante la pandemia. 
 
Las cooperativas de viviendas en cesión de uso tienen como características básicas la propiedad colectiva y el derecho de uso. Esto quiere decir que la cooperativa es propietaria de las viviendas de forma indefinida y por tanto no es posible la transmisión de la propiedad a manos privadas ni la especulación sobre este derecho. En definitiva, un conjunto de personas, llamadas socias, se unen para decidir cómo quieren vivir, qué características tienen que tener sus viviendas, los espacios comunes y qué servicios serán colectivos, entre otros. El objetivo es poner en marcha un proyecto de vida en común. Este es un modelo muy extendido en Dinamarca y Uruguay, y se ha impulsado mucho en Cataluña en los últimos años. 
 
Los talleres de asesoramiento colectivo sobre el derecho a la vivienda y a vivir en la comunidad tienen el objetivo de crear un espacio de confianza donde las participantes puedan compartir sus problemáticas sobre la vivienda, creando relaciones entre iguales basadas en la solidaridad y el apoyo mutuo con las personas que están pasando por las mismas circunstancias. Además, estos espacios también sirven para compartir herramientas y recursos para generar un conocimiento colectivo, que nos ayude también a promover estrategias para pasar a la acción en nuestros territorios y plantear mejorar las políticas públicas entorno el derecho a la vivienda accesible y asequible. 
 
Las voces de la experiencia 
 
Las diferentes experiencias explicadas en el taller, cooperativas localizadas en las tierras del Ebre, Castellar del Vallès, Caldes de Montbui y Barcelona, mostraron como cada una de ellas son una realidad social en diferentes puntos de desarrollo. Hay proyectos que apenas inician, en fase de búsqueda de socias, y otras que pronto empezarán las obras. También había diferencias en las unidades de vivienda que disponen y en la relación con la administración: hay espacios que son cesiones de los propios ayuntamientos y otros que los ha comprado directamente la cooperativa. 
 
Entre las ponentes de la sesión, han sido diversas las razones que las han llevado a participar en cooperativas de vivienda: nace de la motivación personal por estos proyectos colaborativos como también por la necesidad de vivienda y de un proyecto de vida independiente. Explicaban, como este diseño de vivienda cooperativa, a pesar de tener más o menos dedicación e incidencia con las personas con discapacidad según el proyecto, ha solucionado sus necesidades de vivienda accesible porque pueden “no solo llegar a la puerta de tu vivienda sino vivir y disfrutar de todos los espacios en comunidad”. 
 
Los retos de este modelo de vivienda 
 
Durante todo el taller también surgieron retos sobre este modelo, se habló sobre todo de la asequibilidad económica del proyecto que se puede sumar a las dificultades económicas de las personas con discapacidad a causa del agravio del coste de vida. Además, se evidenciaron los propios retos de las personas con discapacidad en relación a las curas y los servicios de apoyo. Tanto las personas que participaban al taller como el público asistente visibilizaron estos retos y pidieron potenciar la ampliación de la cartera de servicios de la administración y el apoyo a estas alternativas de acceso a la vivienda para la vida independiente. Con el objetivo principal de promover la desinstitucionalización de las personas con discapacidad que lo deseen, avanzando a la vez en el acceso real a la Asistencia Personal, como herramienta clave para la autodeterminación y el ejercicio de derechos reconocidos a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (artículo 19), y la participación en la comunidad en igualdad de oportunidades.