El COCARMI denuncia que las entidades de personas con discapacidad de Cataluña se ahogan debido a los impagos del Gobierno de la Generalitat
El Comité Catalán de Representantes de Personas con Discapacidad (COCARMI), máximo representante del movimiento asociativo de la discapacidad en Cataluña, del cual forma parte la Confederación ECOM Cataluña, ha emitido un comunicado de prensa en que reclama una vez más a la Generalitat un calendario de pago de los servicios de titularidad pública que ofrecen las entidades sociales, como por ejemplo centros de día, centros ocupacionales, hogares residencias o servicios de inserción laboral, entre otros.
En el comunicado, el COCARMI informa que ha mandado una carta al presidente de la Generalitat, Artur Mas, en que le recuerda la grave situación financiera que arrastran las entidades y las personas con discapacidad desde que estalló la crisis. Esta nueva reclamación se suma a la que el COCARMI ya hizo el pasado mes de octubre, cuando se anunció un nuevo aplazamiento parcial de los pagos, y en la cual ya denunciaba que se ponía en riesgo la calidad de los servicios y, incluso, podía llevar al cierre de entidades. A la vez pedía vías de financiación en condiciones favorables y que la Generalitat asumiera el coste financiero derivado de los impagos.
Cómo se explica en el comunicado, los últimos meses la situación de las entidades se ha agravado y la incertidumbre sobre los recursos disponibles dificulta el pago de salarios, la continuidad de profesionales especializados, la negociación con proveedores o, incluso, de disponer de servicios básicos. El COCARMI afirma que “desgraciadamente esto repercute en la calidad asistencial, todo y los esfuerzos de las entidades porque esta atención se resienta el mínimo posible”. El COCARMI explica que también han quedado afectados los programas y servicios vinculados a determinadas subvenciones que se renuevan periódicamente.
El malestar de las entidades ante unos compromisos que se incumplen de manera reiterada y, por otro lado, con una presión asistencial cada vez más grande, han sido lo detonante de la negativa que el COCARMI ha dado a la constitución esta semana, como estaba previsto, del Consejo de la Discapacidad de Cataluña (CODISCAT), renunciando en un espacio de diálogo con el cual está firmemente comprometido, según se explica en el comunicado.
El CODISCAT es un órgano formado por la Generalitat, las administraciones locales y los representantes del sector que tiene que servir para trabajar conjuntamente, y de manera transversal, para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacitado. Según explica el comunicado, el COCARMI cree necesario que se normalice la situación y que, por lo tanto, las entidades tengan asegurado la financiación de los servicios para poder recuperar los puentes de diálogo con el Gobierno. Difícilmente los representantes del sector de la discapacidad pueden trazar líneas de futuro si no se supera la situación de angustia del presente, afirman.